Educación con alma: el arte como herramienta de cambio

Un nuevo informe internacional propone modelos y estrategias para integrar las artes en la educación pública con equidad, profundidad y sostenibilidad. El estudio, titulado From Margins to Masterpieces, analiza el estado de la educación artística en escuelas públicas de todo el mundo y destaca experiencias transformadoras que demuestran que el arte no es un lujo, sino una necesidad.
Elaborado por Heddy Lahmann (Universidad de Nueva York) y Community Arts Network, con el apoyo de Porticus, el informe busca impulsar políticas educativas más inclusivas, donde las artes dejen de ocupar un lugar periférico y se reconozcan como un componente esencial para el desarrollo integral de niñas, niños y adolescentes.
Del margen al corazón de la escuela: el arte como motor de transformación educativa
Un informe global revela estrategias para integrar el arte en la educación pública con equidad y sostenibilidad. From Margins to Masterpieces, elaborado por Heddy Lahmann y Community Arts Network con apoyo de Porticus, destaca el rol fundamental de las artes en el desarrollo integral de niñas, niños y adolescentes.
Pese al reconocimiento en políticas nacionales, la educación artística sigue relegada. El informe identifica barreras como falta de inversión, formación docente y débil implementación, y resalta casos exitosos como Crear Vale la Peña en Argentina, cuya metodología Entornos Creativos empodera cada año a 2.000 docentes y 65.000 adolescentes desde una mirada de equidad cultural.
“El arte reconstruye vínculos, fomenta la expresión y abre oportunidades”, afirma Inés Sanguinetti, directora artística pedagógica.
También se subraya la conexión del arte con habilidades del siglo XXI, salud mental y cohesión social. Experiencias de Finlandia, Singapur, Chile e Irlanda demuestran que su integración es posible y efectiva.
Desde la Red Regional de Acción Preventiva en 12 países se reafirma el poder del arte como entorno de cuidado y proyección para jóvenes. Investigaciones como OLA Study avalan su impacto positivo en el bienestar emocional.
“Las artes no son un lujo, son una necesidad”, concluye Lahmann.