Bariloche apuesta al reinicio del turismo estudiantil
En un fuerte trabajo articulado entre el municipio de San Carlos de Bariloche y el sector privado -tanto los prestadores de servicios como las empresas estudiantiles-, la ciudad apuesta a que a partir del 20 de agosto se reinicie este segmento tan representativo para el destino, que equivale al 30% aproximadamente del turismo total en la ciudad y ha sido el más golpeado por la pandemia.
San Carlos de Bariloche está preparada para recibir nuevamente viajes de egresados a partir de la segunda quincena de agosto, con la expectativa de que las condiciones sanitarias sean aptas y Nación lo autorice, con un trabajo minucioso realizado con los prestadores de servicios locales y las empresas de turismo estudiantil, con el compromiso de cada eslabón de la cadena en reforzar los cuidados de los protocolos al máximo.
“Estamos proponiendo algunos ajustes para optimizar el esquema de funcionamiento”, detalló Gastón Burlon, secretario de Turismo del Municipio. Y explicó que “la propuesta es reabrir el segmento a partir del 20 de agosto, teniendo en cuenta que el plan de vacunación viene avanzando con mucha eficiencia y para esa fecha estarán cubiertos los grupos de riesgo etarios asociados a los estudiantes, como padres, abuelos y tíos, además de los anuncios que ya se han realizado sobre la vuelta a la presencialidad en el nivel secundario en el país”.
El objetivo es que los chicos cumplan con ese sueño y cierre de una etapa tan especial en sus vidas y poder continuar con la reactivación económica del sector turístico aprovechando la segunda mitad de la temporada invernal: “Antes de la pandemia, el turismo estudiantil representaba el 30% del ingreso de turistas a la ciudad, y eso se traduce en la cantidad de fuentes de trabajo que genera, tanto de manera directa como indirecta”, sostiene Burlon.
De acuerdo a los datos de la Encuesta de Coyuntura Hotelera, que se lleva adelante sin interrupciones desde 2006, en promedio sólo los hoteles estudiantiles emplean a un promedio de casi 600 personas por año, de las cuales una buena parte -casi el 60%- es personal asalariado permanente, y alrededor del 40% es temporario. En 2020, tras la reactivación turística adaptada a la pandemia, el sector de alojamiento estudiantil empleó a casi 800 personas, superando el promedio de los últimos 14 años. Eso es sólo en términos de alojamiento, al que hay que sumar el impacto en la generación de puestos de trabajo en sectores como gastronomía, chocolaterías, discos, compañías de excursiones, turismo aventura y otros servicios comerciales.
Además, el estrato del turismo de egresados es uno de los más estables durante temporadas altas, medias y bajas. En la temporada baja de primavera, los estudiantes suelen representar alrededor del 45% de los turistas que arriban a Bariloche. Según la misma Encuesta, los hoteles estudiantiles tienen en promedio la tasa de ocupación más alta a lo largo del año, con un 75%, seguido en un lejano segundo lugar por los alojamientos de 1 y 2 estrellas con un 55%, y con el resto de los estratos por debajo del 50%.