Agosto, el mes de las Infancias: ¿y si les regalás nieve?
En agosto es posible disfrutar el fin del invierno y la nieve en su estado pleno con temperaturas más que agradables. Se aproxima un fin de semana largo, que incluye el Día de las Infancias. ¿Te imaginás cumpliéndole a tus hijos el sueño de hacer muñecos de nieve o dar un salto lleno de vértigo en una tabla de snowboard?
El próximo domingo 20 de agosto es el día del Niño, una fecha ideal para regalar experiencias inolvidables y tiempo disfrutado en familia. Unos días en la nieve pueden ofrecer infinitas posibilidades para divertirse juntos: hacer muñecos, ángeles y hasta la inevitable guerra de bolas de nieve a las que los más pequeños no se cansan de jugar. También puede convertirse en el momento ideal para aprender a esquiar o hacer snowboard.
Consejos para pequeños principiantes
Cualquier niño (y adulto) puede divertirse en una montaña nevada, pero iniciar a los chicos en los deportes de nieve abre otro universo de disfrute. Deslizarse sobre una tabla o esquís cuesta abajo, como por un gran tobogán, enciende la adrenalina y despierta todos los sentidos. Pero además, genera beneficios extra para la salud física y emocional de los peques, mejorando la coordinación, el equilibrio, la salud cardiovascular, la resistencia y los mecanismos de adaptación a ambientes nuevos y desafiantes.
Aunque no hay una edad excluyente para comenzar a sacarle provecho a la montaña, quienes más saben sobre el tema consideran que la edad recomendable para empezar a practicar esquí o snowboard son los cinco años. Es imprescindible que los chicos se vayan relacionando poco a poco con la nieve, perdiéndole miedo y descubriendo experiencias divertidas a su medida. Respetar los tiempos de cada niño es fundamental para generar disfrute y buenos recuerdos.
Resulta clave para disfrutar la nieve por primera vez encontrar a la persona que los guíe en ese desafío. Al comienzo, los peques deben aprender los fundamentos del deporte: cómo manejar los esquíes, cómo frenar, cómo detenerse si se dan cuenta que pueden caerse y también (e imprescindible) cómo salir airosos de las caídas. Así ganarán la confianza necesaria para inolvidables bajadas. A la hora de confiar esta tarea, consultar por la experiencia de los instructores, su certificación para la tarea y la organización de las clases.
¿Qué llevar en la valija?
Pasar unos días esquiando en familia requiere ciertos preparativos. Frío, nieve, sol y actividad física, exigen tener en cuenta algunos aspectos al momento de armar las valijas:
Llevá anteojos de sol y protector solar, idealmente de 50 FPS, para los niños.
En cuanto a la ropa, resulta imprescindible el abrigo y que toda la ropa sea impermeable (incluídos guantes). Si te falta alguna prenda, o necesitás equipo para esquiar, muchos centros de esquí o las ciudades cercanas tienen rentals donde podés alquilar lo que necesites (desde tablas hasta accesorios).
¿Dónde encontrar la mejor nieve?
En nuestro país, la cordillera de los Andes ofrece varios centros de esquí para disfrutar de los deportes de invierno. Sin embargo, los expertos coinciden en que la mejor nieve se encuentra en La Hoya (Chubut) por su excepcional nieve seca. ¿Esto qué significa? Que la nieve no tiene agua en su interior, esa que parece granitos de azúcar y que hace que se nos hundan los pies al caminar. Esta propiedad facilita que los esquiadores se deslicen mejor y más rápido sobre la superficie compacta, y además que se mojen menos, evitando el enfriamiento corporal.
El centro de esquí La Hoya ofrece características muy atractivas para una experiencia divertida y cómoda para toda la familia. El acceso es muy simple, y ahorra tener que madrugar o viajar una gran distancia para empezar a disfrutar. Tras un recorrido de tan sólo 12 kilómetros desde el centro de la ciudad de Esquel, por una ruta rodeada de árboles cubiertos de blanco, descubrimos el imponente paisaje en el que se encuentran pistas, medios de elevación e infraestructura.
Al llegar a la base observamos una de las grandes ventajas que el lugar ofrece a las familias: las 30 pistas, además de estar señalizadas y mantenidas en perfecto estado con equipos pisa nieve, están conectadas entre sí haciendo que todas confluyan en la misma base. La seguridad y tranquilidad de todos está garantizada.
Entre la oferta de actividades para realizar en La Hoya, se puede elegir el esquí tradicional, practicar snowboard, o divertirse con los SnowScoot, una disciplina que combina la diversión de una bicicleta con la adrenalina de deslizarse por las pistas de nieve.
En la base hay una guardería infantil que ofrece un espacio de esparcimiento para los más chiquititos. La supervisión especializada en la guardería permite además que los más grandes puedan disfrutar tranquilamente de la montaña.
Para quienes no deseen deslizarse sobre tablas, pueden hacerlo por el aire, en la aerosilla que alcanza 1650 metros sobre el nivel del mar, y desde allí observar la belleza del entorno en altura. Los más tranquilos también pueden elegir caminatas con raquetas guiadas. La Hoya brinda opciones para todos los gustos.
¡A comer se ha dicho!
El centro de esquí cuenta con tres paradores gastronómicos distribuidos estratégicamente en diferentes puntos de la montaña: Püdu Coffe Shop, en la base; El Zorro, en la cota 1650 y Refugio del Esquiador a los 1850msnm.
El servicio en el parador gastronómico El Zorro cuenta con una propuesta de menú diario y una carta bien argentina con manjares ideales para combatir el frío como guiso de lentejas, osobuco con polenta, estofado de ternera con puré de calabaza, o un centroeuropeo goulash de cordero con spaetzle de remolacha.
También hay un abanico de comidas rápidas (y deliciosas) como hamburguesas, milanesas, papas bravas, croquetas de cerdo y de espinaca, sandwich de cordero braseado o sandwich de bondiola ahumada. Para contentar al paladar de los más chicos están las cheeseburger y los panchos.
El parador está emplazado en la parte alta del centro en un edificio que tiene una de sus caras totalmente vidriada, regalando una vista excepcional del paisaje mientras se reponen energías.
Un centro de esquí puede convertirse en un tesoro de experiencias para toda la familia. Deslizarse montaña abajo, sobre un colchón de nieve impecable, acompañar a los más chicos en su primer ascenso en aerosilla hacia las pistas o festejar sus logros ofrecen un placer inigualable, ¿por qué no regalárselo en el mes de las Infancias?
Datos útiles sobre La Hoya:
Ski rental: Cuenta con más de 700 equipos de esquí y 160 de snowboard. Allí también podes comprar o alquilar indumentaria.
Seguridad: El centro cuenta con pisteros socorristas, encargados de asistir a los esquiadores y cooperar ante un accidente.
Escuela y guardería: El centro cuenta con una escuela de esquí infantil con tres niveles Junior y niños, jardín de nieve y guardería, que cuenta con un espacio cálido especialmente adaptado para los más chiquitos.
Docentes preparados: La Hoya cuenta con clases para todos los niveles de destreza, con instructores certificados por AADIDESS (Asociación Argentina de Instructores de Esquí y Snowboard).
Tarifas: Podés encontrarla en la página web