Zdravko Dučmelić, el croata que ilustró a Jorge Luis Borges
Dada la significativa comunidad croata en Argentina y en el marco de los resultados obtenidos en el Primer Censo Digital de los croatas y sus descendientes, compartimos la riqueza de su arte.
De las olas migratorias que arribaron a nuestro país, la croata fue una de las diez más importantes que llegaron de Europa. Trabajaron como campesinos, picapedreros, profesionales u obreros en general, pero también llegaron inmigrantes con una notable veta artística, destacándose entre ellos los pintores.
El paso del tiempo no desintegró sus raíces y son muchos los descendientes de aquellos emigrantes que perpetúan la herencia cultural de un país maravilloso. Dan cuento de ello los resultados del Primer Censo Digital de los Croatas y sus descendientes en la República Argentina, censo que continúa abierto y aún pueden sumarse ingresando aquí , o a través de sus redes Instagram, Facebook y Twitter: @censocroata.
Tal fue el caso de Zdravko Dučmelić, un pintor croata reconocido por su rigor y elegancia. Nacido en 1923 en Vinkovci, estudia en la Academia de Bellas Artes de Zagreb, aunque finalizada la guerra debe exiliarse. Estudia en la Academia de Bellas Artes de Roma, perfeccionándose posteriormente en la Academia San Fernando de Madrid. De España se embarca hacia la Argentina, donde en 1949 se instala en Mendoza, realizando durante casi treinta años de estadía la mayor parte de su obra artística.
Sus obras fueron exhibidas en Buenos Aires, Córdoba, Rosario, Santa Fe, San Juan, Mar del Plata, Tandil y Mendoza. A nivel internacional expuso en Panamá, Japón, Cuba, México, Canadá y Uruguay y realizó exposiciones individuales en su propia tierra (Museo de Arte de Zagreb, Rijeka y Salón Galić de Split).
Las distintas etapas que recorrieron las pinturas de Dučmelić, reflejan una evolución plástica, de decisiones conscientes y voluntarias. Sus períodos pictóricos están unidos entre sí por una gran fineza estética y una elegancia indiscutible. Utilizaba lápiz, témperas, óleos, tintas, ácidos, huevo, pincel, plumas, aceites, barnices, cuchillas y puntas de raspar hechas por él mismo, encontrando lícito todo lo que pudiera serle de utilidad.
Entre los hechos sobresalientes de su obra, se encuentran la incorporación de su autorretrato a la Galería Ufizzi (Florencia, Italia), su óleo “La meseta de piedra, los acantilados y muros” que forma parte de la colección del ex Secretario de Estado Norteamericano Henry Kissinger y la ilustración de los cuentos del libro “Laberintos” del escritor Jorge Luis Borges.
El libro fue una cuidada edición realizada en Buenos Aires (1978), ilustrado con 20 reproducciones en color plena página, de obras al óleo inspiradas en los cuentos “La Casa de Asterión”,” El Inmortal” y las “Ruinas Circulares”. Los cuentos y ilustraciones se acompañan, en página enfrentada, con el párrafo en el cual el artista se inspiró para cada ilustración. En este libro se denota la “afinidad espiritual” entre escritor y pintor, a quien lo unió una profunda admiración y amistad y que da como resultado una gran recreación artística.
El mismo Dučmelić expresa su admiración y su vinculación con la obra de Borges con sus palabras: “Soy, si se quiere, arqueologizante y en esto coincido muchas veces con Borges. Por eso lo ilustré. Hay en mis cuadros algo de ciencia ficción, algo que está añejo, destruido, como en ruinas, o una maquinaria totalmente petrificada, de mundos desconocidos”.
Fue profesor honorario y director de la Escuela de Arte de la Universidad de Cuyo, entre sus alumnos y discípulos se destaca Drago Brajak, artista plástico croata que vive en Mendoza y actual Decano y docente de la facultad de Artes y Diseño de la Universidad de Cuyo.
Dučmelić, falleció el 10 de enero de 1989 en Buenos Aires. Sus obras forman parte de las pinacotecas de prestigiosos coleccionistas de Argentina y el mundo.