Entrevistamos a Maria Elisa Iasevoli / Gerente Puerto Valle Hotel de Esteros

El exclusivo hotel ofrece a sus huéspedes un acceso exclusivo a la vida silvestre del Parque Nacional Ibera, uno de los humedales más extensos del mundo, en la mayor área de conservación de la Argentina. Es el único lodge de lujo en los Esteros, una auténtica estancia argentina de 1868 ubicada sobre la costa del Río Paraná donde naturaleza, historia, servicio personalizado de alta gama y una excelente propuesta gastronómica regional se unen para brindar una experiencia única.
A 2 horas de Buenos Aires en avión, es un destino ideal para combinar con las Cataratas del Iguazú a ravés de las Ruinas de San Ignacio que se encuentran a 1.5 horas del hotel.

Eliana Magdalena entrevista a  Maria Elisa Iasevoli / Gerente Puerto Valle Hotel de Esteros

El corazón del hotel, una singular y cuidada mezcla de detalles, historia, naturaleza y personas, es una tradicional casona correntina de 1868 que alberga amplios y cálidos espacios dedicados a sus huéspedes.

Con 13 exclusivas habitaciones todas con vista al río Paraná, son el resultado de una combinación de arquitectura, confort y cuidados detalles.

La estancia está rodeada de más de 14 hectáreas de parque, diseñado por el prestigioso estudio paisajista Carlos Thays, alberga especies tanto autóctonas como exóticas, e invita a relajarse, disfrutando del silencio y del encuentro con la naturaleza.

Dentro del paquete hay actividades incluídas en los Esteros del Ibera, en el Río Paraná, y en la Estancia.

Traslados desde y hacia el aeropuerto de Posadas.

Guías bilingües para las actividades exclusivas de los huéspedes de Puerto Valle:

En los ESTEROS: expedición a Laguna Valle y Safari fotográfico al Portal Cambyreta.

En el RIO: navegación por el Río Paraná y travesías en kayak.

En la ESTANCIA: paseos a caballo, visita al vivero forestal y a la huerta orgánica.

La propuesta en las comidas rescata la simpleza y el carácter del lugar dando protagonismo a los ingredientes típicos de la zona, tales como peces de río, frutas tropicales y cítricos, parte de las costumbres gastronómicas ancestrales de la región del Litoral.

La carta ofrece una variedad de aromas y sabores que maridan perfectamente con una cuidada carta de vinos, donde los comensales encontrarán algunas de las mejores etiquetas de la Argentina.

En el entorno verde de la estancia, la huerta orgánica refleja una dedicación que se traduce en una miscelánea de productos típicos como la mandioca nativa, diferentes variedades de especias, frutas y vegetales que acompañaran cada momento gastronómico de la estadía.

Los desayunos y meriendas, son donde la pastelería casera toma un rol protagónico en la mesa junto a otras delicias locales como la chipa y el mbeyú.

Para completar la experiencia, no falta el plato protagonista de nuestra cultura culinaria: el típico asado correntino acompañado con vegetales y hortalizas de la huerta orgánica servido en nuestro acogedor quincho.

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Eliana Magdalena, enviada especial

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